1990
Showroom Roberto Verino
Roberto Verino
Barcelona
Premio FAD de Opinión 1991
Fotografía © Lluis Casals
El espacio se ha concebido con la voluntad de descontextualizarlo de la calle, con el fin de lograr un clima que transporte del ambiente urbano a una serenidad natural. Todo se rigió por el principio de micro-arquitectura, desnudando la decoración y purificando la estética de un espacio que quedara adornado con la gente, las telas, los blocs de notas y los dibujos.
A través de transparencias se consigue que muchos de los espacios formen visualmente uno solo.
En la decoración predomina la piedra y la madera. La amplitud de la casa se subraya con una distribución abierta y móvil, y con un juego de presencias y ausencias –los espejos dan media vuelta y aparecen armarios con ruedas giratorias y luz incorporada mediante célula fotoeléctrica.
El pasadizo típico en este tipo de viviendas que se une a las dos zonas extremas es un cielo y una tierra. El suelo es una alfombra de patinado en verde, algo oxidado, que recuerda el moho, los prados húmedos. El techo es un cielo azul atlántico, plomizo.